El papiro de Ebers
Descubierto entre los restos de una momia en la tumba de Assasif, en Luxor, por Edwin Smith en 1862, fue comprado a continuación por el egiptólogo alemán Georg Ebers, al que debe su nombre y su traducción.
Fue redactado en el antiguo Egipto, cerca del año 1500 antes de nuestra era; está fechado en el año 8.º del reinado de Amenhotep I, de la dinastía XVIII. Es también uno de los más largos documentos escritos encontrados del antiguo Egipto: mide más de veinte metros de longitud y unos treinta centímetros de alto, y contiene 877 apartados que describen numerosas enfermedades en varios campos de la medicina como la oftalmología, la ginecología, la gastroenterología..., y las correspondientes prescripciones, así como un primer esbozo de depresión clínica respecto al campo de la psicología. Se conserva actualmente en la biblioteca universitaria de Leipzig.
La farmacopea egipcia de la época recurría a más de 700 sustancias, extraídas en su mayor parte del reino vegetal: azafrán, mirra, áloes, hojas de ricino, Loto azul, extracto de lirio, jugo de amapola, resina, incienso, cáñamo, etc. El papiro también incluye varios remedios obtenidos de insectos y arañas.
Escrito en hierático, (simplificación del jeroglífico, que para más comodidad, solían usar los escribas) a dos tintas: rojo y negro y en tan buen estado de conservación que parecía recien escrito. Con el fin de poder adaptarlo a nuestra forma habitual de leer documentos, en la traducción al inglés del Dr. P Bryan, del libro The Papirus Ebers ( edición de 1930), se lo edita en 110 columnas (páginas), de 20 a 22 lineas, subdividido en 877 secciones y faltando las páginas o columnas 28 y 29.
En el papiro ebers, los egipcios muestran un grado de conocimiento del funcionamiento del cuerpo humano, su estructura, el trabajo de los vasos sanguíneos y del corazón, anatomía y fisiología, toxicología y hechizos. El papiro también tiene muchas recetas que muestran el tratamiento de muchas enfermedades por los animales, la planta|toxinas de las plantas, los minerales y toxinas que todavía se producen hoy en día.
Perspectiva Toxicológica
La importancia toxicológica de los papiros se refiere a la gran cantidad de hierbas medicinales y las explicaciones de varias toxinas que el papiro clarifica. A continuación se muestra una pequeña lista de las hierbas destacadas en la escritura (extraído de Crystallinks). Hierbas Medicinales mencionados en el Papiro de Ebers. La medicina egipcia de la época hacía uso de más de 700 sustancias, extraídas en su mayor parte del reino vegetal: cebollas, ajos, azafrán, mirra, cerveza, hojas de ricino, extracto de lirio, jugo de amapola, higos, semillas de lino, resina, incienso, cáñamo, opio, etc.